Plan de provocación al Tren Maya
Cada día se enreda más el Presidente de la Republica en sus ansias de martirizarse porque ahora resulta que todos quieren que las cosas le salgan mal, y que decline de su mal llamada Cuarta Transformación que hasta ahora no ha sido más que una simple regresión a los tiempos del Partido de Estado como en su momento lo protagonizó el Partido Revolucionario Institucional. Y claro esta que Lopez Obrador se parece a muchos de sus antecesores, porque siempre lanza culpas al pasado de lo que ocurre en estos tiempos.
Ahora salió con que existe un Plan de Provocación contra su bodrio de Tren Maya, que para decirlo claro y preciso no servirá como medio de transporte ya que el recorrido será de más de mil quinientos kilómetros en siete tramos, de los cuales el tramo uno consta de doscientos veintiséis kilómetros, y de palenque a Escárcega pasará por ciento seis localidades y siete municipios de Chiapas, Tabasco y Campeche.
Y por si aquellos que piensan que el tren será como los que existen en Europa, habrá que decirles que será con los mismos que tiene Ferrocarriles de México, porque al paso que van las obras, no creo que se alcance a terminar el proyecto número uno del mandatario actual porque falta tan solo un año para que se acabe su tiempo de elegibilidad, y eso quiere decir que por mucho que lo diga, no lograr terminar su capricho de Tren Maya.
De acuerdo al plan maestro del proyecto que autorizó el Presidente de la Republica, se busca potenciar la industria turística, generar una mejora económica para los pueblos de la zona, y reducir el tiempo para las personas que se desplazan de Ciudad en Ciudad. Para decirlo más claro, no existe ningún motivo en el Plan Maestro, que hable de las bondades del proyecto, porque se sigue realizando con variantes al Olán original de acuerdo a los avatares de la naturaleza.
Aquel que se especializara en el arte de la provocación, ahora llama provocadores a quienes seguimos insistiendo de que lo que se está construyendo es un bodrio más que salió de su nívea cabeza, y que en realidad será un rotundo fracaso. En lo que sí ha tenido un éxito rotundo es en desmadrar las ciudades mayas que aún se encuentran en la selva, y que por desgracia algunas de ellas ya han sido afectadas y tramos de algunas de ellas, derrumbadas.
Francamente no entiendo cuál es el plan de provocación del Tren Maya del que hablo el Presidente de la Republica, o quizá se refiera a que no podrá concluir su obra insigne, pero todavía tiene algo con lo que puede presumir a la posteridad, y no es otra cosa que la colusión con las grandes bandas de narcotraficantes, con las que ha pactado en los últimos meses. Así de simple nuestra lamentable circunstancia en los tiempos de la ¿Cuarta Transformación? Por cierto, de la CDMX a Chetumal se hacen menos de dos horas. En tren se harán al menos dieciocho, si es que llega a Chetumal. Al tiempo. [email protected]
Lic. en Derecho por la UNAM. Lic. En Periodismo por la Carlos Septien. Conferencista. Experto en Procesos de Comunicación. Expresidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión, Miembro del Consejo Nacional de Honor ANPERT, con cincuenta años de experiencia en diversos medios de comunicación.
