Congreso de Quintana Roo nombra a nueva titular de Derechos Humanos, en sesión nocturna
Dos años tuvieron que pasar para que se designara una nueva titular de Derechos Humanos en el Estado de Quintana Roo (Cdheqroo); se trata de Omega Istar Ponce Palomeque, quien fue nombrada como la nueva ombudsperson del estado de manera unánime.
La nueva titular la Comisión de Derechos Humanos fue nombrada en una sesión que atrajo la atención por llevarse a cabo la noche del lunes 11 de diciembre; los miembros de la Decimoséptima Legislatura votaron poco antes de la medianoche para designar a la nueva titular de la Cdheqroo, cuyo anterior presidente fue Marco Antonio Toh Euán, hoy funcionario de Solidaridad.
Es relevante destacar que Omega Istar Ponce Palomeque fue una de las 12 candidatas que se registraron para el proceso y comparecieron ante los diputados de Quintana Roo.
Es necesario recordar que el litigio legal de dos años que retrasó el nombramiento de la titular de Derechos Humanos se originó por las intenciones de la exdiputada Judith Rodríguez Villanueva de asumir la Presidencia de la Cdheqroo, lo cual fue considerado por organismos civiles como un conflicto de interés.
Omega Istar Ponce Palomeque dirigirá el organismo estatal encargado de velar por los Derechos Humanos durante un periodo de cuatro años. Anteriormente, se desempeñó como coordinadora de Vinculación Interinstitucional y con Organizaciones No Gubernamentales de la Cdheqroo.
La candidatura de la nueva titular de Derechos Humanos es cuestionada por organismos de la sociedad civil.
Se rumorea que Ponce Palomeque tiene vínculos cercanos con el extitular Toh Euán y que incluso fue respaldada por panistas del grupo de Eduardo Martínez Arcila; además, se ha difundido la información de que podría ser sobrina del exdiputado Hernán Villatoro.
Incluso, ciudadanos y organismos civiles, a través de informes obtenidos mediante solicitudes de Transparencia, cuestionaron la candidatura de Ponce Palomeque.
A la nueva titular de Derechos Humanos, la acusaron de enviar solo unos pocos correos electrónicos al mes y simular reuniones de las que no hay evidencia, todo ello para percibir un salario mensual de aproximadamente 44 mil pesos.
También se afirmaba que canalizaba casos al área jurídica, aunque esta instancia negaba recibirlos; a pesar de estas denuncias, como se evidencia, no fueron atendidas.