A ROCHA MOYA NO LO QUIERE NADIE, NI ANDY
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Pues la Presidenta Claudia Sheinbaum debe tener mucho cuidado con el señor Rubén Rocha Moya porque hasta ahora huele mucho a crimen organizado, pero también a corrupción, porque ni siquiera los sinaloenses lo quieren ver o tenerlo cerca a causa de sus deslices en cuanto a beneficiar al Crimen organizado se trata, y eso es uno de los mayores pecados que puede tener un Gobernador, y más si es de la mal llamada Cuarta Transformación.
El señor tiene setenta y cinco años, y desde el 2021 se ha encargado de la Gubernatura de uno de los estados más violentos del país, y hasta ahora los resultados han sido desastrosos a la vez que bastante sangrientos. Y no se puede quejar porque ya los grandes narcotraficantes han sido encarcelados, es más, hasta el épico Ismael el Mayo Zambada decidió entregarse y dejar de causar daño a este país.
El problema es que las instrucciones de Andrés Manuel López Obrador a la Señora Sheinbaum es que mantenga esa cercanía con lo que queda del Cartel que en su momento de esplendor estaba todos los días en los medios de comunicación por su activismo en el sórdido mundo de las drogas, que en Estados Unidos causaron un desastre desde que por desgracia salió el Fentanilo a las calles no tan solo de este país, sino en la Unión Americana.
Ruben Rocha Moya nació en Badiraguato, la parte más neurálgica del Cartel de Sinaloa, y conoce muy bien lo que significa la historia de las grandes bandas de narcotraficantes que se han generado en esa región y las hazañas que se cuentan desde Joaquin Guzman Loera, y su hijo Ovidio, que hasta ahora permanecen recluidos en Estados Unidos una vez que la DEA los alcanzó.
Pero quizá también habrá que señalar que la Presidenta ha sido muy condescendiente de la delincuencia organizada de este país, y eso quiere decir que sigue respetando las ligas que en su momento construyeron los hijos de Andrés Manuel López Obrador en esos lugares donde la ley es lo que determinen los grandes varones de las drogas, quienes por cierto sigue teniendo mucha cercanía con los hijos del Expresidente Andrés Manuel López Obrador.
Pero tampoco debemos olvidar los mexicanos que la actual Presidenta cuenta con muchas de esas ligas que el Señor Andy ha seguido cultivando con el Cartel de Sinaloa, lo que pone en entredicho al Gobierno de la República, porque no debemos olvidar que el mismo Andy y la actual Mandataria tiene ligas de parentescos muy cercanos, desde hace muchos años, pero cada quien con sus culpas, porque hasta ahora lo que tenemos es un Narcogobierno, porque Andy está muy cerca del Cartel de Sinaloa. Nunca antes un gobierno fue tan cínico. Al tiempo.