Ixil sufre daños ambientales y humanos por la voracidad de la mafia inmobiliaria

La plaga inmobiliaria está imparable y ahora va con todo en el pueblo maya de Ixil, Yucatán, solapan los daños que trae como consecuencias para los pobladores, violación a sus derechos humanos y discriminación a la gente, pero el más grave es la contaminación, aumento de basura y daños al subsuelo con el aumento de la población, que adquiere las viviendas y mansiones en los residenciales que construyen con todas las autorizaciones; líderes ejidatarios han denunciado a las autoridades estatales y recientemente en una reunión con la titular de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales, Alicia Bárcena, le hicieron ver el despojo de sus tierras, el daño al medioambiente y la criminalización de la que son víctimas por parte de empresas inmobiliarias.
Temen pobladores, que se sienten a la deriva, que Ixil, que cuenta con más de 134 mil metros cuadrados de extensión, ahora enfrenta la amenaza de perder 5 mil 200 hectáreas adicionales.
Tienen la esperanza que el gobierno federal que los escucho en reunión con otras comunidades mayas que también han resistido el despojo de sus tierras durante años. Confían que la federación intervenga al ofrecerles un diálogo abierto, y los pobladores de Ixil, Kinchil, Santa María Chi y Santa Gertrudis Copó; tienen toda la confianza y frenen a la plaga inmobiliaria.
La denuncia es que están, “Enfrentando el despojo de 350 hectáreas cerca del centro de Ixil por parte de familias de la casta yucateca, como los Abimerhi, Millet y entre otros, que siempre han estado ligadas a la clase política y mafias corruptas del estado de Yucatán”.
Acusan la represión y la indignación porque “La Fiscalía del Estado de Yucatán ordenó cercar con alambre de púas ese polígono obedeciendo a esas poderosas familias del estado, y haciendo a un lado los derechos fundamentales de los ejidatarios, quienes han estado por décadas y tienen toda su documentación al día con firmas de autoridades pasadas y que con argucias; como siempre, no quieren reconocer.
Pero además acusan que están permanentemente recibiendo amenazas de las inmobiliarias y que les urge construir desarrollos habitacionales privados, como Aludra , Cedrón y otros que ya están proyectados y más le vale, que estén en paz.
Cabe destacar que en 2023, Ixil defendió las tierras ejidales que habían sido cercadas. Se enfrentaron a 300 policías de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), que acudieron al lugar acompañados, supuestamente, por los dueños de los predios. Y allí detuvieron arbitrariamente a tres campesinos que fueron vinculados a proceso por amenaza y vandalismo.
El presidente municipal de Ixil, José Cocom, recordó que en las administraciones pasadas exgobernadores se han apoderado de las tierras del territorio de Ixil. Y quieren seguir apoderándose de algo que no les pertenece. Por eso piden a las autoridades federales frenen la voracidad inmobiliaria y las amenazas por defender sus tierras.