Tras el rastro de unas pipas que compraron tres secretarios de Estado
Columna: Expedientes MX
Autor: Norberto Vázquez
El costo fue superior a los 94 millones de dólares y adquirieron por medio de la empresa I.I.I. Servicios, S.A. de C.V., una filial no paraestatal de Pemex, mediante un préstamo de PMI Norteamérica, filial también de Pemex.
Existe todo un velo de opacidad sobre cómo se compraron las pipas y distribuir gasolina como estrategia para combatir el huachicol. Sí, esos auto taques que tenían además un programa de reclutamiento de choferes cuya estrategia central significaría usar una nueva flota de pipas en sustitución de los ductos. Lo que pocos imaginaron fue que la misión de adquirir estos camiones especializados requiriera cuatro funcionarios de primer nivel.
Ahí intervinieron una comisión está integrada por el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, la de Economía, Graciela Márquez, la de la Función Pública, Irma Eréndira Sandoval acompañada de su Oficial Mayor.
El rastreo de información sobre esta compra y el dato de que la anunciada e importantísima (tanto así que requirió cuatro ministros) obtención de las pipas, es que sólo tienen muy pocas circulando a pesar de la urgencia de este combate contra el robo de combustible, a casi dos años de los daños colaterales por la escasez temporal de gasolina.
Hoy por lo pronto, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó varias irregularidades en el proceso de compra de estas pipas que el Gobierno federal realizó en 2019, con carácter urgente, para enfrentar el desabasto de combustibles que se originó a consecuencia del cierre de ductos.
En los resultados de la revisión de la Cuenta Pública 2019, entregados a la Cámara de Diputados, se asienta que en los registros de Pemex de aquel año la adquisición de las 612 pipas no se vio reflejada en un aumento de los traslados terrestres de combustibles. De igual manera, la empresa negó en sus informes que estas unidades se hubiesen empleado para enfrentar un escenario de desabasto, sino una “problemática de distribución” de las costas al centro del país.
En el informe, la ASF añadió que la gestión administrativa de la compra de pipas, efectuada a través de Pemex Corporativo (PCORP) y Pemex Logística (PLOG), toda vez que no garantizó las mejores condiciones disponibles en cuanto a precio, calidad y financiamiento.
Entre otras anomalías, se encontró que las pipas adquiridas no fueron entregadas en el plazo previsto, no reunieron las especificaciones técnicas establecidas en las Normas Oficiales Mexicanas (NOM) y no se efectuó una inspección de unidades.
El costo de las pipas fue superior a los 94 millones de dólares y adquirieron por medio de la empresa I.I.I. Servicios, S.A. de C.V., una filial no paraestatal de Pemex, mediante un préstamo de PMI Norteamérica, filial también de Pemex, bajo un esquema que no estuvo sustentado en ningún contrato o acto jurídico o administrativo.
Sin embargo, la ASF indicó que en esta emergencia únicamente 29 de las 612 pipas adquiridas, realizaron 44 recorridos, con los cuales suministraron apenas un millón 811 mil litros de gasolina a 32 gasolineras. Pemex no dio ningún argumento para explicar por qué las 583 pipas restantes no se utilizaron para el mismo objetivo.
A lo largo de unos meses, este reportero ha realizado diversas peticiones de información rastreando los contratos de compra-venta en la adquisición de estas pipas y todo ha sido un mar de burocracia. Las secretarías de Hacienda, Función Pública, Relaciones Exteriores y Economía, no saben nada de la supuesta compra y todos aducen a que es Pemex el real involucrado en estas adquisiciones.
No hay nada de nitidez. ¿Cuántas pipas en circulación existen? ¿Cuántos choferes contrataron y sus sueldos? ¿Cuántas pipas sé compraron en realidad y su costo? Así la transparencia en la 4T.
Para llevar…
Los institutos políticos de representación popular, cada vez más están afinando sus candidaturas hacia el 6 de junio. Pero lamentablemente, y para desacierto de la gobernabilidad en México, cada vez vemos a personajes de la farándula, deportistas, cronistas de TV, cantantes y actores. Nada delimita su participación, así es la democracia. Pero que México no se vuelva un circo. No se lo merece.
