Las estupideces de la Sheinbaum
La señora Claudia Sheinbaum señalo que no va a comenzar una guerra, y tiene razón, porque la única guerra que tiene hasta ahora es la de combatir al Poder Judicial de este país, con la finalidad de someterlo y deshacerlo para alzarse con el más alto trofeo que ha deseado Andrés Manuel López Obrador, quien siempre a querido ser el líder de este país durante muchos años.
Si de algo podemos tener la seguridad es de que Andrés Manuel López Obrador está detrás de la crisis que está provocado la señora Sheinbaum por un capricho del tabasqueño que pretende convertirse en el “Venerado Camarada Líder” de esta nación. Y lo que en realidad pretende es deshacer los Poderes de la Unión con la finalidad de convertirse en el que tome las decisiones del pueblo mexicano.
Esa es la realidad de lo que hasta ahora hemos venido observando, porque hasta ahora tienen la mayoría en el Poder Legislativo, pero también el Poder Presidencial, y lo que ambiciona es destruir al Poder Judicial con la finalidad de alzarse como el líder máximo de la nación y el único que tome las decisiones para en futuro de este aún maravilloso país.
Sheinbaum dice que no va a empezar una guerra, pero el ejército mató a 19 personas en Sinaloa, explotaron dos coches bomba en Guanajuato. Guerrero es un polvorín, Chiapas a punto de la guerra civil, el país en llamas y Claudia Sheinbaum se limita a repetir arengas de AMLO, que en su mayor parte los mexicanos las han enviado al caño porque han comenzado a abrir los ojos y a entender que nos quieren arrebatar esta Patria tan nuestra y tan lejana.
Lo más grave de todo esto es la división que ha sembrado Andrés Manuel López Obrador y que es esa misma que hasta ahora ha venido utilizando Claudia Sheinbaum con el mismo discurso que durante tantos años le conocimos a Andrés Manuel López Obrador, y que ahora lo trae la Señora Sheinbaum sin siquiera modificarle algunas palabras, lo que habla de su ambición por agradar al presunto expresidente, de quien por desgracia sigue recibiendo órdenes.
La científica se ha convertido en el títere de Andrés Manuel López Obrador, y por desgracia trae el mismo odio del tabasqueño contra el Poder Judicial, que hasta ahora ha sido el contrapeso de los designios de convertir a este país en una tiranía. Lo que yo no alcanzo a entender es como un hombre tan talentoso como Ricardo Monreal ha seguido todos los pasos que le ha indicado Andrés Manuel López Obrador, y eso estará en los registros de la historia. Así de simple. Al tiempo.