La sombra de Salinas en los programas de Obrador
Desde el domingo pasado, vengo escuchando que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) desaparecerá en el próximo proceso electoral del 2027; un partido que cuando gobernó el país y los estados, creó las instituciones que ahora tenemos, aunque cuando llegó el Partido Acción Nacional (PAN) al Gobierno Federal, hizo unos cambios; ahora con la llegada del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) el espíritu de los programas sociales es el mismo, aunque con otros nombres.
“No hay nada nuevo debajo del sol”, sentencia el libro bíblico de Proverbios; les pongo el ejemplo, en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari (1988-19949) el programa de ayuda social se llamó “Pronasol” (Programa Nacional de Solidaridad), luego fue la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) y hoy la conocemos como Secretaría del Bienestar (Sebi); con ello, la sombra de Salinas en el gobierno de AMLO está presente.
Pero como digo, el espíritu de esos programas sociales de la época salinistas está presente en el gobierno obradorista, pues con “Solidaridad” había tres vertientes de acción: Solidaridad para el bienestar social, enfocado en el mejoramiento inmediato de los niveles de vida; Solidaridad para la producción, creación de oportunidades de empleo y desarrollo de las capacidades y recursos productivos; y Solidaridad para el desarrollo regional, que consistió en la construcción de obras de infraestructura de impacto regional y ejecución de programas de desarrollo de regiones específicas.
Si hago un comparativo, estas tres vertientes están presentes en este sexenio; “el bienestar social” hoy consiste en otorgar las pensiones para las personas de la tercera edad, así como la ayuda para las madres solteras, los discapacitados y las becas para los jóvenes; con eso el gobierno obradorista contribuye con mejorar la calidad de vida de las personas.
“Solidaridad para la producción”, hoy tiene el nombre de “sembrando vida”, donde el Gobierno otorga apoyos económicos y en especie a sujetos agrarios mayores de edad que habitan en localidades rurales, cuyos municipios se encuentran con niveles de rezago social y que son propietarios o poseedores de 2.5 hectáreas disponibles para ser trabajadas en un proyecto agroforestal.
Según este programa, las personas beneficiarias son acreedoras a un pago mensual de 6 mil 250 pesos entregados de manera directa a través de transferencias electrónicas y, en caso de que se necesite y compruebe, podrán recibir apoyos adicionales y/o en especie (como semillas, herramientas, plantas u otros insumos).
Hay que sumarle el programa “Producción para el Bienestar”, apoyo con el mínimo 6 mil 200 pesos y un máximo de 24 mil pesos a personas productoras de granos (maíz, frijol, trigo panificable y arroz, entre otros), amaranto, chía, caña de azúcar, café, cacao, nopal o miel.
Como tercer elemento tenemos “Solidaridad para el desarrollo regional”, que en esta administración federal está muy marcado, en la Región Sureste, donde hay microrregiones como la del Golfo de México, que es evidentemente de naturaleza petrolera, así que en Paraíso, Tabasco fue construida una refinería; para poder tener un circuito turístico del sureste, incluida la península de Yucatán, el Gobierno Federal construyó el Tren Maya.
Así puedo enumerar las obras por regiones en las que está dividido el territorio mexicano, como el tren transístmico que va del Pacífico al Golfo, las presas en el noreste, los sistemas de riego en el centro del país; las inversiones extranjeras en el noroeste; las conexiones aéreas del Aeropuerto “Felipe Ángeles” y el de Tulum llamado “Felipe Carrillo Puerto”.
Para terminar, quiero dejar en claro que los programas de Solidaridad no cumplieron a cabalidad con sus objetivos debido a la corrupción en su aplicación; esperemos que los programas del Bienestar de la Cuarta Transformación no tengan la tentación de solo mejorar a sus familiares y amigos. Al tiempo…
SASCAB
Dos presidentes electos están muy movidos en su respectivo municipio, se trata de Estefanía Mercado Ascencio, de Solidaridad (Playa del Carmen), quien antes y después del paso del huracán Beryl, estuvo muy pendiente de la población, principalmente en las colonias y comunidades vulnerables. Además de realizar un recorrido de agradecimiento ante sus electores.
El otro alcalde electo es José Luis Chacón Méndez, de Cozumel, quien está metido con las mesas de trabajo para que las y los cozumeleños aporten sus ideas y propuestas, con el fin de crear el Plan Municipal de Desarrollo de lo que será su gobierno. No cabe duda que los mueve la pasión de servir a sus conciudadanos. Ahí se las dejo…