Guerra sucia en la política
Por Martín G. Iglesias
Hay un dicho popular que dice “la calumnia cuando no mancha, tizna”, refiriéndose a las verdades a medias que cuentan algunos políticos coludidos con medios de comunicación, quienes ahora más que nunca carecen de objetividad, veracidad e imparcialidad al informar, porque en sus titulares no “presumen”, sino “sentencian”.
Pues aprovechando la temporada de política, hay una serie de lucha campal por las candidaturas, sean uninominales o plurinominales, donde cada aspirante a un cargo busca la manera, mal llamada estrategia, para poder “bajar” a su contrincante, al grado de atreverse a meterse hasta con la familia, una vileza que llega a convertirse en “guerra sucia”.
En ese contexto, el autor del libro “La guerra sucia en la competencia político electoral” Benito Martínez Ramírez, explica que existen expresiones por parte de actores políticos, militantes, simpatizantes e incluso hasta de voceros oficiales y representantes que no cesan de promover y difundir, por cualquier medio, campañas de desprestigio, desacreditación y de odio en contra de sus adversarios, utilizando para ello, el menor pretexto, fundado o infundado, del que puedan echar mano para lograr sus propósitos particulares, a eso se le llama “guerra sucia”.
Pero hay factores que analizar, por ejemplo, el dinero que gastan los que utilizan esta mal llamada estrategia. La mecánica es contratar un “medio de comunicación”, pagarle por los servicios del material elaborado y este medio contrata publicidad en redes sociales, así que en la leyenda de quien paga el anuncio no aparecerá el nombre del político, sino de acuerdo a las reglas de contratación de publicidad, aparece el “medio” o la persona física que esta responsable de esa página.
Otros utilizan la estrategia de mandar a hacer medios de comunicación a su medida, a quienes no les importa la objetividad, veracidad e imparcialidad, buscan incidir en el colectivo social con sus “noticias”. Todavía no olvido las columnas que escribía un gobernador en un desaparecido diario de circulación estatal asentado en Playa del Carmen, donde el Gobernador en turno tenía que aprobar el titular de portada; el matrimonio de político con medios de comunicación, en mi experiencia, no termina bien.
Un factor más, es la morbosidad de los propios participantes en las redes sociales, o quienes están inmersos en el mundo de la política y medios de comunicación. Como no hay regulación, cualquier puede levantar una falsedad, bajo la premisa que “la mentira (la calumnia) cuando no mancha, tizna”.
Solo hay que ver cómo redactan sus “notas” o “reportajes”, pues toda guerra sucia utiliza la violencia verbal y simbólica, que antecede o acompaña a la eliminación física (atentados) o mediática del adversario. Las guerras sucias buscan polarizar al electorado: buenos contra malos, corruptos contra honestos, amenazas para Quintana Roo contra salvadores de Quintana Roo; ricos contra pobres, ‘chairos’ contra’ antichairos’; expertos contra inexpertos, puros contra impuros. Ahí se las dejo…
SASCAB
Dentro de una semana, el 1 de diciembre, será inaugurado el Aeropuerto de Tulum “Felipe Carrillo Puerto”, por el Presidente de México Andrés Manuel López Obrador, acompañado de la Gobernadora Mara Lezama Espinosa.
Dicho Aeropuerto transportará a 5.5 millones de pasajeros; está integrado por una base militar y una planta de manejo de residuos, pretende convertirse en la segunda puerta de entrada de los viajeros al sureste mexicano. Tendrá una pista principal de 3 mil 700 metros y 13 posiciones para vuelos comerciales, además de un hangar y una planta de tratamiento de aguas residuales.
Las aerolíneas confirmadas son Viva Aerobús que conectará con Tulum desde Monterrey, Guadalajara, Tijuana, Toluca, el Aeropuerto Felipe Ángeles (AIFA) y el Aeropuerto Internacional de Ciudad de México; y Mexicana de Aviación, anunció al AIFA y al aeropuerto de Tulum como sedes de sus operaciones, de modo que ofrecerá conexiones nacionales desde la mayoría de aeropuertos del país. Al tiempo…