Cambio de tendencia
Agustín Vargas.
PUNTALES
- Gasto en obras insignia se desata
- Subsidios y transferencias al alza
- Costo de deuda crece casi 50%
- CDMX, riqueza y estilo de vida
Durante mayo pasado las finanzas públicas arrojaron resultados relativamente estables, pero también es cierto que se perciben riesgos en el futuro inmediato. El quinto mes del 2023 fue también, de acuerdo con las cifras oficiales, donde se dio el banderazo para soltar las amarras del gasto destinado a los programas socio- electorales.
De acuerdo con el más reciente informe de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, a cargo de Rogelio Ramírez de la O, las cifras revelan la debilidad recaudatoria, con una caída de 1.4 % en ISR y 11.9% en IVA, producto de la desaceleración de la economía, pero también evidencian fuertes presiones del gasto, lo que sugiere al mismo tiempo un cambio de tendencia.
El gasto total neto aumentó en mayo 24.2% respecto a un año antes. En enero-abril había caído (-2.1%), pero el gasto acumulado crece 2.5% una vez que se incluye mayo, producto seguramente de las necesidades crecientes del sector público para atender sus programas y proyectos prioritarios.
Hay algunos rubros interesantes por su crecimiento anual sólo en el mes de mayo. Los subsidios, transferencias y aportaciones crecieron 176%, o sea 80 mil millones de pesos (mmp), el gasto en inversión física 39% en buena medida como consecuencia de los proyectos insignia como el tren maya; el costo financiero de la deuda se elevó en 15%, en especial como resultado del aumento de 47.8% en los intereses del gobierno federal.
En cuanto al cambio de tendencia del gasto acumulado resaltan los gastos de subsidios, transferencias y aportaciones, cuyo cambio respecto al año anterior pasa de una caída de 6.8% a un incremento de 12.8% del periodo enero-abril a enero-mayo, la inversión física (4.5% a 11.5%) y pensiones y jubilaciones (1.5% a 2.4%).
Ello sugiere una aceleración en el ejercicio de los programas sociales, los programas de inversión insignia de la administración y la inercia de las pensiones. Cabe subrayar que el aumento anual del costo financiero de la deuda pública continúa creciendo fuertemente en alrededor de 50% anual.
CDMX, riqueza y estilo de vida
Julius Baer, institución bancaria suiza con oficinas en México, publicó recientemente su informe sobre “Riqueza y Estilo de Vida Globales 2023”, en donde destacó que la Ciudad de México subió un lugar en el ranking, para ocupar el lugar 21, dentro de las “ciudades donde se vive bien”.
La clasificación de las ciudades está basada en el Índice de estilo de vida de Julius Baer, que analiza el costo de una canasta de bienes y servicios representativa de lo que es “vivir bien” en 25 ciudades alrededor del mundo.
La capital de México subió un lugar en dicho ranking, llegando al puesto 21, situada entre Manila y Frankfurt. Los precios locales de la canasta (básica) en la ciudad han aumentado en promedio 13.5% en los últimos 12 meses, pero no ha experimentado los cambios más drásticos que han tenido otras ciudades, con la excepción del alojamiento hotelero, que ha aumentado 97% interanual.
Como México es uno de los países más visitados del mundo, el turismo es una parte importante de su PIB, y la industria se desempeñó mejor que la mayoría durante la pandemia debido a que las fronteras se mantuvieron abiertas. La demanda parece seguir aumentando, con un estimado de visitas en 2023 de 40 millones de turistas.
En línea con el resto del mundo, además de la hospitalidad, los viajes también se han encarecido en el último año: los costos de los vuelos aumentaron 25% y la alta gastronomía 19%.
Según Julius Baer una consideración importante para individuos y familias adineradas es la relativa asequibilidad de la Ciudad de México en comparación con otras ciudades de su Índice, donde más de la mitad de los bienes y servicios son menos costosos que el promedio global, especialmente bienes raíces de primer nivel, educación privada y seguro médico.
Estos tres elementos clave del estilo de vida se combinan con altos niveles de habitabilidad y una vibrante escena cultural para hacer de la Ciudad de México un lugar atractivo para las personas adineradas, incluso teniendo en cuenta las consideraciones de seguridad necesarias.
