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Madres Buscadoras Denuncian Ineficiencia de la FGJ

Madres Buscadoras Denuncian Ineficiencia de la FGJ

Eliza Ongay
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Colectivos de Madres Buscadoras en Quintana Roo denuncian la falta de respuesta y profesionalismo de la FGE en la búsqueda de personas desaparecidas, exigiendo justicia y recursos adecuados para hallar a sus seres queridos.

Las Madres Buscadoras de Quintana Roo exigen justicia y señalan la falta de apoyo de la Fiscalía General del Estado en los casos de desapariciones, revelando un incremento alarmante del 60 por ciento en estos crímenes.

 

Las Madres Buscadoras de Quintana Roo han expuesto la ineficiencia y falta de compromiso de la Fiscalía General del Estado (FGE) en la investigación de casos de desaparecidos. A través de protestas y declaraciones públicas, han manifestado su frustración ante la falta de avances y la fuga de información dentro de la institución, que obstaculiza la localización de sus familiares.

 

Romana Rivera Ramírez, presidenta del colectivo “Verdad, Memoria y Justicia”, destacó que pese a los esfuerzos de los colectivos, las autoridades no brindan una respuesta efectiva, demorando hasta cinco meses en atender las pistas recabadas.

Uno de los principales problemas es la falta de personal especializado, con apenas dos antropólogos disponibles para todo el estado. Esto ha obligado a los familiares de las víctimas a realizar búsquedas de campo por su cuenta, arriesgándose y enfrentándose a situaciones peligrosas.

 

Las denuncias no solo se limitan a la negligencia en las investigaciones, sino también a la vulneración de las familias afectadas, quienes han sido víctimas de amenazas y amedrentamientos. En algunos casos, los agresores poseen detalles específicos de las denuncias, lo que apunta a una posible filtración de información desde dentro de la FGE.

Aumento de las Desapariciones en Quintana Roo

Quintana Roo ha sido escenario de un aumento alarmante de desapariciones en los últimos años. Según datos recientes, las desapariciones en el estado se han incrementado en un 60 por ciento en lo que va del año . A nivel nacional, México ha registrado más de 110,000 personas desaparecidas desde 1964, una cifra que sigue en ascenso .

Las madres buscadoras han señalado la ineficacia de las autoridades en atender los casos de desaparición forzada, lo que ha generado una creciente desconfianza en la FGE.

A pesar de sus constantes esfuerzos, las familias de las víctimas enfrentan grandes dificultades para obtener respuestas satisfactorias, y en muchos casos, las investigaciones se estancan por años.

 

Un Testimonio de Lucha: La Historia de Carmita Zapata

Un ejemplo conmovedor de esta lucha es el caso de Carmita Zapata, quien lleva casi siete años buscando a su hijo, Julián Hernández, desaparecido en Cancún en 2017. Durante este tiempo, Carmita ha enfrentado la indiferencia de las autoridades y la fuga de información que ha puesto en riesgo a su familia. A pesar de las amenazas recibidas, Carmita se niega a rendirse y continúa exigiendo justicia.

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El caso de Julián refleja la impunidad con la que operan las redes de secuestro en la región. Aunque uno de los responsables fue detenido, la falta de pruebas permitió la liberación de otros implicados. Carmita exige que la FGE actúe con mayor celeridad y que se garantice la protección de las familias afectadas.

Demandas y Esperanzas de las Madres Buscadoras

Las madres buscadoras han realizado varios plantones frente a las instalaciones de la FGE en Cancún, solicitando la contratación de peritos especializados y recursos suficientes para agilizar las búsquedas. También piden el apoyo de organismos internacionales para ejercer presión sobre las autoridades locales, con la esperanza de detener la ola de desapariciones que afecta al estado.

 

La situación en Quintana Roo refleja una crisis de derechos humanos que ha llevado a las familias de los desaparecidos a tomar las riendas de las investigaciones.

El trabajo de los colectivos de búsqueda ha sido clave para hallar pistas sobre las víctimas, pero es evidente que se requiere una intervención más efectiva por parte de las autoridades.

Eliza Ongay


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