El “Gober precioso” Mario Marín y Jean Succar Kuri fueron trasladados a penales federales
El exgobernador de Puebla, Mario Marín alias el “gober precioso” y el pederasta confeso, Jean Succar Kuri, fueron trasladados este viernes 27 de enero a penales de máximas de seguridad.
El titular de la Secretaría de Seguridad Pública de Quintana Roo, Rubén Oyarvide, confirmó que el “gober precioso” y el empresario de origen libanés, junto a otros 198 internos de alta peligrosidad de cárceles bajo jurisdicción del estado, fueron trasladados del Centro de Readaptación Social de Cancún (Cereso), hacia Chetumal, para luego ser enviados a penales federales de máxima seguridad.
Mario Marín alias “El exgober precioso”, fue trasladado al Cereso 1 denominado el Altiplano en el Estado de México. Mientras que el empresario libanes, Succar Kuri fue llevado al Cereso número 15, en el estado de Chiapas.
La reubicación del exmandatario poblano y del empresario de origen libanés forma parte de un fuerte operativo a escala federal. El traslado se realizó la madrugada de este viernes por autoridades de los tres órdenes de gobierno.
Los trasladados fueron internos de las cárceles de Cancún, Playa del Carmen y Chetumal, canalizando 200 internos hacia penales federales.
El convoy estuvo integrado por cinco camiones custodiados por Fuerzas Armadas. Los otros presos fueron distribuidos, vía aérea a penales de máxima seguridad, de Oaxaca y los Mochis.
“El gober precioso” Mario Marín, acusado de tortura
Mario Marín Torres fue detenido en febrero de 2021, fue en Acapulco. Un juez le dictó un auto de formal prisión por acusaciones de tortura, en agravio de la periodista y activista Lydia Cacho.
A Marín Torres, conocido como “el gober precioso”, está señalado de ser parte de un entramado institucional que actuó en contra de Lydia Cacho. Para “escarmentarla” por la publicación de su libro “Los Demonios del Edén”. Dicho libro documenta la operación de una red internacional de trata de personas y explotación sexual de menores de edad, integrada por altos funcionarios, miembros de la clase política y empresarios, entre los que menciona a Kamel Nacif.
Mientras que el empresario libanés, Succar Kuri, señalado como cabeza de esta red, fue sentenciado en agosto de 2011 por el delito de pornografía infantil y corrupción de menores, en agravio de siete víctimas –entonces menores de edad– a 112 años de cárcel.
Tras una revisión de esa resolución, el Primer Tribunal Unitario del Vigésimo Séptimo Circuito redujo su condena a 94 años.
Tanto el “exgober precioso”como Succar Kuri se encontraban en prisión en un penal de Cancún.