Lidia Rojas lleva agua a su molino en la Cámara de Diputados con la clínica del ISSSTE en Chetumal
Javier Chávez Ataxca
CAFÉ DE ALTURA
No está nada mal que la regidora chetumaleña Lidia Rojas Fabro haya presentado en un salón de la Cámara de Diputados un punto de acuerdo para rescatar a la clínica del ISSSTE de nuestra capital, respaldada por la bancada de su partido: Movimiento Ciudadano.
Lidia dijo en la conferencia de prensa que nuestra clínica de la avenida Insurgentes lleva 18 días sin electricidad y tiene un transformador dado en préstamo por Yucatán. Humillante a todas luces, valga la expresión.
Pero los minutos de gloria de la excandidata del Movimiento Naranja a la alcaldía capitalina no tendrán efectos prácticos, porque los naranjas nada pueden hacer en un territorio dominado a placer por diputados de la 4T.
No imagino a morenistas y verdes sensibilizados por Lidia Rojas y preparando una comisión para comprobar el infernal estado de la clínica del ISSSTE. Ni en sueños ocurrirá.
Lo innegable es que Lidia Rojas llevó agua a su molino para mantenerse vigente como opción e ir por tercera vez a la conquista del Palacio Municipal de la avenida Álvaro Obregón.
También Lidia deja muy mal parada a la diputada federal de nuestro segundo distrito, con cabecera en Chetumal: la profesora morenista Elda Xix Euan.
La regidora naranja dijo que Elda está más ocupada en su mudanza para tomar la atractiva rienda de la Secretaría de Educación, dejando su curul en poder de la exsenadora cancunense Marybel Villegas.
Ahora sí, al ISSSTE maletas, profesora Elda Xix.